lunes, 29 de septiembre de 2008
Miscelánea
Quiere el corazón hablarme y yo no le escucho, paseo entre árboles frondosos, salpican las hierbas su agua prestada, me vienen pensamientos que espanto con abanico imaginario. Hay algo que lucha por mostrarse y yo no quiero saberlo...
Siempre me calma el agua. Podría deslizarme y dejar fluir pensamientos y sentimientos en cascada hasta que encuentren el lugar perfecto donde se amansen...
Prefiero la miscelánea de La Habana, compay...
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1 comentario:
Y en tu ciudad no hay océano. :-(
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