En las buhardillas de la capital del reino soplaba un aire tibio de otoño...
Ella leía la historia y se volvía a conmover, sólo que ahora con distinta intensidad.
y fuera sigue avanzando el otoño
esa estación que a ella tanto le gusta.
Todo hojas de fuego, de ocre, de amarillo...
Verá con él un hayedo, o un robledal o un bosque de castaños, justo ahora, en el verano indio de Vermont.
Todo hojas de fuego, de ocre, de amarillo...
sábado, 26 de septiembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario